Flacidez de rostro y papada

La flacidez del rostro propia del envejecimiento se debe a varios motivos. Los principales son la disminución del volumen graso del rostro y la diminución en la producción de colágeno y elastina que son proteínas estructurales de la piel, encargadas de otorgar firmeza.

Para tratarlo y prevenirlo contamos con bioestimuladores y avanzadas tecnologías dependiendo del caso.

En cuanto a la pérdida de volumen, la suplimos con la colocación de ácido hialurónico en la zona donde se produce esta pérdida de grasa y en ciertos puntos específicos de sustentación del rostro. Para reactivar la producción de colágeno y elastina podemos utilizar tecnologías como el Ultrasonido microfocalizado y asociarlos en algunos casos con productos llamados bioestimuladores.  

Los Ultrasonidos focalizados o HIFU se utilizan para elevar, tensar, y tonificar la piel sin cirugía. Este sistema estimula de forma natural el colágeno en las capas profundas de la piel dejando intacta la capa superficial.

Se usan sobre todo para la restructuración del óvalo facial, línea mandibular, el cuello y el escote, aunque los resultados son también muy interesantes para elevar las cejas y mejorar las bolsas de los párpados. 

Pero no todos los HIFUS darán el mismo resultado. Los ultrasonidos microfocalizados con visión ecográfica son el único sistema sin cirugía aprobado por la FDA americana para un lifting no invasivo de la piel.

Ultherapy® se utiliza en rostro, cuello y escote. Logrando un efecto tensor sin cirugía y de forma suave y natural. (PUESTAS )

Otras tecnologías que utilizamos para flaccidez son los láseres, tanto el Erbio glass Soft Lift® de 1570nm como el Neodimio YAG de 1064nm son laseres que producen una potente remodelación cutánea. Mejorando visiblemente la flaccidez.